Cuando un cristal sin protección se rompe, los fragmentos pueden salir disparadods a gran velocidad y suponen un riesgo importante para las personas, con posibilidad de sufrir heridas graves e incluso mortales, además de producir daños materiales. Las láminas 3M de seguridad ofrecen protección contra posibles lesiones por golpes accidentales, caídas o tropiezos, especialmente en guarderias y colegios.